
Una emergencia sanitaria silenciosa: la preocupante caída de la vacunación infantil
Según un informe conjunto de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y UNICEF, los niveles de inmunización infantil han sufrido un estancamiento y una preocupante caída a nivel global, con un impacto significativo en países como Argentina. Este declive, que se ha acentuado desde antes de la pandemia de COVID-19 y no ha logrado recuperarse, genera una alarma considerable entre los especialistas en salud pública. La falta de vacunación deja a millones de niños en riesgo de contraer enfermedades que podrían prevenirse fácilmente.
El reporte destaca cifras concretas que reflejan la gravedad del problema. En Argentina, la cobertura de la primera dosis de la vacuna triple viral (sarampión, rubéola y paperas) apenas alcanzó el 80% en 2023, y la segunda dosis, crucial para una protección completa, fue administrada a menos de dos tercios de los niños de 5 años. Estos porcentajes están muy por debajo del 95% necesario para evitar brotes y lograr la inmunidad colectiva. Un caso aún más dramático es el de la vacuna quíntuple, cuya cobertura cayó a un 66%, una disminución considerable en comparación con los niveles prepandémicos.
Los expertos señalan varias causas para este fenómeno. La pandemia alteró drásticamente los servicios de salud y las campañas de vacunación, pero el problema también se ve agravado por la desinformación y la propagación de mitos sobre la seguridad de las vacunas. La reticencia a vacunar a los niños es una consecuencia directa de la falta de confianza y la desinformación que circulan en la sociedad.
La OMS y UNICEF advierten que la baja cobertura de vacunación no es solo un problema local, sino un fenómeno mundial que amenaza con la reaparición de enfermedades erradicadas o controladas, como el sarampión y la poliomielitis. El informe hace un llamado urgente a los gobiernos y las autoridades de salud para que implementen estrategias activas de vacunación, fortalezcan los sistemas de salud y lancen campañas de concientización para restablecer la confianza en la ciencia y proteger a las poblaciones más vulnerables.