
Los riesgos de la inteligencia artificial en la práctica médica
El avance de la inteligencia artificial (IA) en la medicina promete diagnósticos más rápidos y precisos, así como una mejor gestión de datos clínicos. Sin embargo, investigaciones recientes advierten que su implementación no está exenta de riesgos que podrían comprometer la calidad de la atención.
Uno de los principales peligros es la “descalificación” o pérdida de habilidades profesionales. Un estudio publicado en Lancet Gastroenterology and Hepatology mostró que, tras tres meses de uso de sistemas de IA para asistir en colonoscopias, la capacidad de los médicos para detectar lesiones precancerosas sin esa ayuda se redujo significativamente. Esto plantea un escenario en el cual la dependencia tecnológica debilita la destreza clínica, volviendo más vulnerable la práctica cuando la IA no está disponible.
Otro riesgo señalado es la descalibración de los sistemas. Los algoritmos pueden fallar frente a variaciones mínimas en el entorno, como cambios de iluminación o calidad de la imagen, lo que puede derivar en diagnósticos erróneos si el profesional no está preparado para reconocerlos y corregirlos. En este contexto, la supervisión humana continúa siendo indispensable.
Además, surge la preocupación por la formación de las nuevas generaciones de médicos. Expertos advierten que el uso prematuro de IA en estudiantes o residentes podría limitar el desarrollo de habilidades críticas en la etapa de aprendizaje. Si incluso profesionales con décadas de experiencia muestran pérdida de capacidades tras un corto período de exposición a estas herramientas, el impacto en quienes aún se están formando sería mayor.
En síntesis, aunque la inteligencia artificial ofrece un enorme potencial para mejorar la medicina, también puede generar dependencia, pérdida de criterio clínico y errores técnicos. El desafío es encontrar un equilibrio: aprovechar la tecnología como aliada, sin relegar la experiencia y el juicio médico que sostienen la calidad del cuidado de la salud.
Fuente: SaberenSalud.